Quesos Gallegos
Hay muchos y muy buenos quesos gallegos:
Intentaremos enumerar algunos de los más conocidos entre ellos:
Arzúa - Queso de Ulloa:
Posiblemente el más conocido en Galicia donde es muy popular. Pero no muy coocido fuera de Galicia. Se produce en 24 municipios. Es tan popular que se celebran dos festivales al año con él. Elaborado exclusivamente con leche de vaca.
Tetilla:
Imposible de confundir con otros por su forma, como un pecho de mujer. Posiblemente el queso gallego más popular con más de 40 productores. Su sabor es lácteo con un ligerísimo gusto salado y su textura es suave y cremosa.
San Simón da Costa:
Similar al tetilla, con sabor ahumado. Ha recibido numerosos premios internacionales.
Cebreiro:
Es un queso fresco gallego también elaborado con leche de vaca, pero el menos parecido a los otros tres ya nombrados. Su interior es granuloso y su aroma es similar al yogur de vaca.
Touza Vella:
De la zona de la Ribeira Sacra se elabora con leche de cabra semicurada. Sabor muy característico y aroma natural madurado durante dos meses.
Ha sido premiado en los WCA (World Cheese Awards) Bronce y Plata.
O Rexo:
Sabor muy mantecoso de Allariz procedente de leche de oveja. Las ovejas pastan todo el año juntos al río Arnoia. Los quesos se cambian de posición cada 24 horas. Los fabricantes tienen un ecoespacio.
Marianne:
El Marianne es un queso elaborado con leche fresca de vaca madurada en heno y cuajo durante tres meses. Muy similar al Emental suizo. Tacto muy elástico y aroma intenso.
Galmesano:
El queso Galmesano es un queso de pasta cocida elaborado a partir de leche de vaca pasteurizada. Con una sensación quebradiza al corte, similar a los quesos tradicionales italianos.
Xiros:
De aroma y sabor fuertes, también elaborado con leche fresca de vaca y con corteza enmohecida. Se elabora con leche de vaca de animales que están todo el año en los pastos.
La lechería está al lado de la propia granja. Y todo se hace a mano.
Como se ha dicho antes, en Galicia hay más de 100 quesos comerciales. Y al mismo tiempo, muchas granjas elaboran pequeñas cantidades para vender en los mercados locales. Así que su número es incalculable.